WTA 500 de Bad Homburg: Jessica Pegula campeona por solidez sobre el pasto alemán

GuianFuXYAArYun

La estadounidense no cede set y gana el partido final a la polaca Iga Swiatek, obteniendo el noveno título de su carrera.

Jesssica Pegula mantuvo el pulso firme en una muy pareja pulseada y se quedó con el título en el WTA 500 de Bad Homburg. En la final, venció a Iga Swiatek por 6-4 y 7-5 para firmar su tercer título del año y el noveno de su carrera.

Swiatek debía disputar la primera final sobre hierba de su carrera contra Pegula en el WTA Bad Homburg. Este era el undécimo duelo entre ambas, en el marco de un historial favorable para la polaca con seis victorias y cuatro derrotas. Dentro de esos partidos, ya se habían cruzado en dos finales y ambas cayeron para el lado de Iga también.

Las sensaciones venían siendo muy positivas para Swiatek en un año que recientemente le había traído algunos disgustos. Tras cortarse su enorme racha de partidos invicta en Roland Garros, volvió a competir esta semana y mostró una muy buena adaptación al césped.

Como resultado de eso, superó sin ceder sets a Jasmine Paolini, Ekaterina Alexandrova y Victoria Azarenka para allanar el camino hacia su primera final del año. Pegula estaba en un partido por el título por quinta vez en el 2025. A cuestas cargaba con los éxitos en Austin y en Charleston y con los tropiezos en las definiciones de Adelaida y Miami.

En suelo alemán, venía de remontar un partido en el que estuvo contra las cuerdas frente a Linda Noskova en la semifinal, donde la checa sacó para ganarlo. Antes, eliminó a Emma Navarro y a Katerina Siniakova.

El partido fue ajustado y parejo desde el inicio, prevaleciendo una dinámica de peloteos con mucha intensidad por parte de ambas jugadoras. Pegula golpeaba buscando desbordar con su regularidad, pero Swiatek también era capaz de sostener el ritmo con la buena movilidad que venía mostrando durante toda la semana en la hierba alemana. En ese trámite, la polaca contó con una bola de break en el cuarto juego, pero no logró romper con la paridad.

Las cosas se mantendrían así hasta el séptimo game, en el que Iga mostró algunas inconsistencias y perdió el saque tras salvar dos break points previamente. El game de cierre fue complicado para Pegula, que se encontró al inicio con una fuerte presión de Swiatek desde las devoluciones.

Sin embargo, esa intención ofensiva tuvo como contraparte momentos en los que los tiros fueron muy forzados y terminaron en errores. Así fue que la estadounidense pudo capitalizar la situación y llevarse el parcial por 6-4.

Swiatek profundizó la tendencia ofensiva al inicio de la segunda manga y mientras lograba sostener con facilidad sus primeros turnos al servicio, también lograba generar algunas complicaciones en los de su rival.

Del otro lado, Pegula seguía firme para contener y mantenerse a flote desde la velocidad y la consistencia. Así, la primera mitad del set avanzó con games peleados, pero sin chances de quiebre para ninguna de las dos jugadoras.

Conforme el partido se fue acercando a la zona de definición, las intensidad no decrecía y allí la norteamericana mostró mucha templanza. Cuando las papas quemaban, ganó su primer juego de saque del encuentro en cero para ponerse cinco iguales.

Al siguiente, obtuvo un quiebre vital para el 6-5 con una gran derecha cruzada luego de muy buenos intercambios. La diferencia fue mínima, pero Pegula pudo sacar ventaja a partir de su solidez y su carácter para imponerse sobre una Swiatek que iba al frente, pero alternando buenas y malas.

El resultado fue 6-4 y 7-5 para la de Buffalo, que obtuvo de esta forma el tercer título de la temporada, dejando en evidencia nuevamente que es una de las más sólidas del 2025 en la WTA. Swiatek sigue sin poder romper la racha sin consagraciones que arrastra desde Roland Garros el año pasado, pero pudo sumar una buena semana de rodaje sobre hierba antes de Wimbledon.